EGIPTO
La finalidad de la pintura en
EGIPTO:
La
presencia de la pintura a lo largo de la historia es evidente, pero no siempre
ha tenido el mismo valor o el mismo significado. Según la época se pintaba por diferentes razones, por un
diferente fin y hasta para diferentes personas o Dioses.
La época
con la que comenzamos a analizar la finalidad de la pintura es la época Egipcia.
Esta época se formó aproximadamente de 3500 A.C. a -395 D.C. Esta localizado en
el noreste de África al sur del mar Mediterráneo y al oeste de Mesopotamia. En
el antiguo egipcio se produjeron una extraordinaria variedad de pinturas,
esculturas, construcciones arquitectónicas, joyas, textiles, cerámicas, etc.
(Stephen Farthing, 2016 pg. 28). Todo esto con el fin de unirse con el mas
allá, ya que en esa época resaltaba mucho la creencia de ese mundo que solo
muertos se puede descubrir y que los faraones eran los representantes de los
Dioses en la tierra.
Basándome
en el libro “Breve historia del arte egipcio” de Miguel Hermoso se infiere que
la pintura se realizaba dentro de las tumbas de los faraones con el fin de
demostrar cómo eran ellos. La técnica básica de los egipcios para pintar en esa
época consistía en primero cubrir la pared con una capa de estuco blanco
después se cuadriculaba el muro, posteriormente se Trazaba con tinta la pared.
Si era necesario se pintaba la pared de algún color, pero una capa delgada para
que no se perdiera lo antes dibujado. Por último se repasaban los contornos de los dibujos y se les ponía
color. En esa técnica los colores se disuelven en agua y se les añaden
aglutinantes (cola, goma, huevo). Algunas de las pinturas se encuentran muy conservadas
ya que se encontraban adentro de las tumbas, lo cual era un ambiente seco. (Hermoso, M. 2008 pg. 37)
La
finalidad con la que los egipcios pintaban no era por belleza o estética sino
la perfección, que sea lo más parecido al faraón y a toda su familia. Pintaban
la imagen del fallecido en las paredes de la tumba, para lograr ser reconocidos
en el más allá, con el fin de que disfrute eternamente de los placeres de la
otra vida.
La pintura
tenía ciertas reglas o características que se debían seguir y que ayudaban a
darle sentido a la finalidad de las pinturas. La primordial era la ley de la
frontalidad, que significa que las figuras se dibujaban con el rostro, brazos y
piernas de perfil, mientras que el tronco y el ojo de frente. Otra
característica era la ley de escala jerárquica que consistía en que las
personas más importantes (dioses y faraón) van en tamaño más grande que la
demás gente, animales, etc. Las pinturas también tenían ausencia de
perspectiva, que quiere decir que no había profundidad de figuras, sus rostros
siempre los hacían jóvenes. Los colores también importaban, la piel de los
hombres se representaban de color oscura, ocre, mientras que en la de las
mujeres era más clara, ocre claro; Osiris se representaba con el color de piel
verde; el oro o su color simbolizaban al Sol, etc. Los dioses eran
representados con cuerpo de humano y cara de animal. Todas estas
características eran de suma importancia en esa época ya que creían que si no
se representaban tal cual podrían confundirse y no lograr pasar al más allá.
“El arte producido durante el imperio nuevo,
extravagante y visualmente sofisticado, es técnicamente el mejor logrado, y
deliberadamente el más ambicioso del Antiguo Egipto; de hecho ninguna
civilización posterior logró sobrepasarlo. Los vestigios de este tipo de arte,
que han sobrevivido tres milenios, son el testimonio de una civilización urbana
que evidentemente tenía claro que el arte cumplía un papel fundamental a la
hora de garantizar prosperidad cultural y espiritual de su pueblo.” (Stephen
Farthing, 2016. pg. 29.)
Referencias:
· Hermoso, M. (2008) Breve
historia del arte egipcio, Montesinos.
· Farthing, S. Cork, R. (2016) Arte. Toda la historia. Editorial Blume.
·
Canessa, R. (2015). Pintura en el
antiguo Egipto. Sitio web: https://desarrollodelarte.blogspot.mx/2010/07/pintura-en-el-antiguo-egipto.html
·


Comentarios
Publicar un comentario